*Nos encontramos celebrando la vida Germán Camilo en cada uno de nosotros, por ello, con el respeto que este momento exige, con el amor que hay en mi corazón por mi hermano, quiero manifestar que hoy mis palabras… son de alegría, mis palabras hoy son de entusiasmo, mis palabras hoy son de Júbilo pascual…
Sé que en su paso por este mundo, con su estilo propio, tímido, muchas veces caprichoso y con las carcajadas a flor de piel, logró dejar en nosotros una impronta que jamás se borrará, a pesar del paso inevitable de los años… hasta nuestro nuevo encuentro en la eternidad con él, en la compañía del Padre Celestial.
Germán Camilo ha dejado en nuestros corazones sus enseñanzas, sus experiencias vividas, sus caprichos a los que él nos habituó pero sobre todo, y lo más importante, es que en cada uno deja una semilla que en algunos apenas cayó en otros esta germinando y en otros ya dio fruto , y es a nosotros a los que nos corresponde multiplicarla y hacerla reproducir en los demás, tal y como él lo hizo en cada uno de nosotros.
Que alegría, poder contar con la compañía de todos ustedes, cada uno de sus hermanos Sacerdotes, en cabeza del Señor Cardenal Rubén Salazar, fieles testigos de la labor realizada por German Camilo en esta bella y hermosa misión a la que el Señor ya hace más de 35 años lo llamó y que hoy después de 29 años de su labor pastoral, sin titubeos puedo afirmar: cumplió a cabalidad.
Que alegría poder contar con la presencia de sus amigos con quienes compartió aquellos momentos de esparcimiento, quienes también pudieron fortalecerle en las dificultades, y ¿por qué no? tal vez, en una que otra ocasión, pudieron alcahuetearle alguna pilatuna.
Que alegría poder contar con la presencia de quienes fueron sus colaboradores en cada una de las parroquias por donde pasó, quienes pudieron recibir de él sus enseñanzas como persona y como Pastor. Que alegría poder contar con la asistencia de cada uno de quienes hicieron parte de su comunidad en las diferentes parroquias en las que el padre Camilo fue asignado para cumplir su ministerio sacerdotal.
Que alegría poder estar aquí en compañía de sus familiares, quienes lograron compartir con él los distintos momentos de vida y saber que en la intimidad de familia: padres, hermanos, cuñados y sobrinos, pudimos acompañarlo y vivir junto a él todo una experiencia de humildad, y ejemplo de paciencia y profunda fe a través de su convalecencia y días que se nos convertían en largas jornadas de esperanza frente a todo el proceso que tuvo que sobrellevar día a día, en el lugar que él mismo escogió: la casa de nuestros padres; en la que pudimos develar su verdadera esencia de ‘maravillosos ser humano’ que por donde pasó dejó el terreno abonado de amor a Dios y vivencia del Evangelio, a la manera de Jesús.
La gran impronta que nos deja a todos es su profunda devoción hacia la Santísima Virgen María y a su esposo San José, a quienes siempre se encomendaba y cuya devoción nos contagió.
Doy gracias a Dios por la existencia de mis padres: el profesor Antero y la señora Fabiolita, como cariñosamente le conocemos, a quien Dios escogió como Instrumentos para que dieran la vida a Germán Camilo quienes son los artífices de poder estar disfrutando en este momento de todo este legado que él ha dejado en nosotros.
De Germán Camilo me quedo con sus carcajadas pegajosas que siempre lograba llamar la atención de quienes le rodeaban y que fueron las únicas que pudieron superar a las de mí esposa.
Me quedo con su ingenua timidez que solo reflejaba la bondad y dulzura de su corazón.
Me quedo con la imagen de un valeroso y virtuoso hombre al cual muy difícilmente podré imitar pero si del que muy fácilmente podré decir con gran orgullo “¿usted no sabe quién soy yo?” Pues nada más, ni nada menos que el hermano del padre Germán Camilo Urrego Beltrán, ¡pa’ que le pique!
Para terminar, compartir con ustedes algunas palabras que extracté de la reflexión que el día de ayer ofreció Monseñor Augusto Campos, su actual Vicario Pastoral, quien al referirse a él dijo:
“Camilo tenía una forma muy peculiar de vivir la vida, es una de esas personas con las que usaron el molde y lo rompieron, se fue desgastado físicamente pero se fue con las manos llenas de servicio y llenas de alegría, pero no se fue con el corazón vacío. Quien vive para otros se encontrará con su capacidad inagotable de servicio. Para nosotros es una separación mientras que para Camilo es una alborada de luz y de vida”
Esta muy real, profunda y bella descripción de un ‘maravilloso ser humano’ realizada por quien fue su superior solo la pudo lograr German Camilo con su autenticidad y libertad de hombre de Dios.
En conclusión, Germán Camilo hizo vida en él el texto Bíblico que escogió para su ordenación Sacerdotal:
“Al contrario, Dios ha elegido lo que el mundo considera necio paro confundir a los sabios; ha elegido lo que el mundo considera débil para confundir a los fuertes” 1Cor.1,27.
*Extractos de las palabras de su hermano Bernardo Urrego, en las exequias.
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